El reencuentro con los y las docentes del municipio de Ayapel es siempre para nosotros un motivo de celebración. Encontrar seres humanos tan especiales y comprometidos con el proceso educativo es una alegría y un honor para la Corporación. En esta ocasión pudimos trabajar con los docentes de El Cedro, Marralú, Playa Blanca y Alfonso López en la consolidación de todo lo que se ha venido construyendo en los meses anteriores. A pesar de las difíciles condiciones de trabajo que deben afrontar estos establecimientos educativos, el compromiso, la dedicación y el interés por acompañar sus comunidades se mantiene vigente. Todo nuestro respeto, admiración y gratitud para este grupo de personas que en medio de la adversidad siguen adelante construyendo país.



